Carlos es un joven ejecutivo de una empresa de tecnología. Hace poco acaba de obtener un ascenso importante. Sus nuevas responsabilidades requieren de nuevas competencias. En su posición anterior conoció sobre coaching en un taller que tomó. Convenció al jefe de desarrollo de talento humano que contratará un proceso durante seis meses para desarrollar las competencias necesarias para el nuevo cargo. Al principio, el especialista de talento humano estaba un poco incrédulo pero con el paso de los meses los cambios en cuanto al estilo de liderazgo de Carlos le animaron a contratar procesos para otros ejecutivos de la planta principal.
Un estudio de Hay Group estima que entre el 25% al 40% de las empresas Fortune 500 tiene coaches ejecutivos para acompañar a su “ejecutivos estrella” a lograr mayor efectividad. No hay duda que el futuro del desarrollo organizacional va de la mano con el crecimiento de la oferta de coaching. Y aunque es difícil valorar la industria del coaching en América Latina, sobre todo porque es una industria que está apenas madurando y en la que las fronteras de la actividad no están bien delimitadas, de hecho a veces son caóticas, podemos tomar datos de mercados más desarrollados para por lo menos tener una idea de hacia dónde apunta el coaching profesional para empresas.
La industria del coaching está en etapa de lanzamiento en América Latina. Eso nos coloca en una interesante situación a quienes somos pioneros, sobre todo en el coaching orientado a los negocios. Qué sucede en mercados más desarrollados. Un artículo de HBR menciona que “la industria de coaching está estimada en 1.000 millones de dólares en los EE.UU“. Una cifra nada despreciable y que podría darnos una idea de la magnitud que tendrá en Latinoamérica una vez que entre en etapa de crecimiento.
En cuanto a los ingresos percibidos por los coaches ejecutivos en EE.UU. la empresa Sherpa Coaching realizó un estudio en que determinó que el 14% de los coaches ejecutivos reportaron ingresos de $500 por hora, 35% entre $150 a $299 por hora y el 43% entre $300 y $500. Otro informe de Harvard Business Review en el 2009 destaca que un coach ejecutivo del más alto nivel pueden obtener una remuneración de al menos $500 la hora, “la misma tarifa que tiene un psiquiatra reconocido en Manhattan”. Según la experiencia que tenemos en Business Coaching School una cifra realista para la región sería entre $180 a $300 por sesión.
La industria del coaching tiene un gran futuro. Sobre todo por la demanda de procesos que mejoren la eficiencia de los ejecutivos en mercados emergentes dadas las nuevas características de los mercados globalizados en los que la competencia obliga a ser creativos e innovadores de forma permanente.
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